sábado, diciembre 20, 2008

¿Realmente influyen las comedias románticas en nuestras relaciones amorosas?

Hace ya unos días, leí una noticia en el Faro de Vigo que decía que las comedias románticas influyen negativamente en nuestras relaciones amorosas, generando grandes frustaciones entre sus espectadores porque luego no se cumplen las espectativas. La verdad es que me ha llamado mucho la atención, pues soy una gran fan de las comedias románticas. Conozco a muchas personas que tambien lo son, principalmente mujeres, y no creo que vivan frustadas en su vida personal. Igual hay personas que vuelcan sus propias frustaciones viendo historias con final feliz: para que ver películas que acaban mal, si a lo mejor su vida no les gusta. Este estudio dice que " transmiten una falsa sensación de "relaciones perfectas" y expectativas nada realistas". No creo que nadie piense que un magnate de los negocios se va a enamorar de una prostituta de Hollywood Boulevard y que por ella va a dejar el negocio del siglo ("Pretty Woman"), claro que si se parece a Julia Roberts, igual es tan tonto y cae... ¿no? ¡ja,ja,ja!

¿Por qué nos gustan las comedias románticas? Supongo que en el fondo porque no perdemos la esperanza de que al final el amor triunfe. En las comedias romáticas, a pesar de todo, la vida de sus protagonistas a nivel sentimental no es fácil. Poniendo como ejemplo, mi comedia favorita "Cuatro bodas y un funeral" (no os puedo decir cuantas veces la he visto, porque ya he perdido la cuenta y las veces que me quedan todavía), imaginaros al pobre Hugh Grant (pobre, pero guapo y encantador) que conoce en una boda a la mujer de su vida (Andie Mcdowell), una americana que se va al día siguiente de regreso a su pais, que cuando la vuelve a ver la encuentra prometida con otro, para colmo le cuenta todo su historia sentimental de cabo a rabo (no sé si alguien le gusta que la persona que quiere le cuente pasadas experiencias, a mi no), su siguiente encuentro es en la propia boda de la chica, imaginaros la frustación de este hombre cuando ve como sus vidas definitivamente se alejan. Este chico plenamente decepcionado se casa con otra y el mismo día de la boda se entera que ella se ha separado de su esposo... ¿Pensais que la vida de Hugh Grant en esta película es un camino de rosas? Para ejemplo, esta escena en la que le confiesa su amor a Andie Mcdowell y la chica se va dejándolo tirado como una colilla,....



En el fondo, esperamos que todos nuestros trabajos e ilusiones tengan algún tipo de conpensación, que todos los esfuerzos perdidos de alguna forma sean recompensasos tarde o temprano, no sólo en la vida amorosa, sino en el resto de los aspectos de la vida. ¿Hay alguien qué no tenga la esperanza de un final feliz? ¿Sí? ¿Hay alguien? Pues lo compadezco. Una vida sin esperanza, es una vida frustada...

1 comentario:

Anónimo dijo...

ya se que una vida sin esperanza es una vida frustrada,yo tengo mucha esperanza en encontrar a mi hombre ideal y tambien en que la persona por la que estoy colada un dia aparezca en la puerta de mi casa con un gran ramo de flores...
pero conoceis a alguien que le haya pasado so alguna vez, menuda suerte no?
de vez en cuando podrian hacer películas romanticas que acabasen mal de verdad, no se, que a la protagonista no le haga caso su principe ideal, pero que aprenda a vivir con ello y con el tiempo que encuentre a otro que tambien le guste.
Soy la primera que ve peliculas romanticas una y otra vez y que despues de verlas se le queda una acongoja fatal en la garganta, pero que le vamos a hacer...
Tal vez las pelicuas romanticas con final infeliz nos ayuden un poco a las romanticas empedernidas a poner los pies en la tierra y a ver que a nuestro alrededor hay mas cosas. Pero solo a ponerlos los pies un poquito en la tierra, por que es muy bonito soñar...